Verificando las mediciones
La investigación moderna sobre el clima hoy en día ya no consiste únicamente en realizar perforaciones y recoger el hielo (ice-core), sino que son fundamentales los modelos climáticos complejos y las llamadas mediciones topográficas mediante láser realizadas desde aviones y drones. Ahora bien, todos estos modelos y estos métodos científicos deben verificarse sobre el terreno de manera cruzada para garantizar que los resultados sean consistentes, y para este fin, Groenlandia es el lugar perfecto, según Jason Box.
«En Groenlandia tenemos la capacidad de hacer mediciones relativamente simples para comprobar nuestros modelos y las mediciones que se realizan mediante satélite y otros dispositivos», explica. «Son métodos con tecnología menos sofisticada, pero que sirven para verificar la información compleja».
El Ártico y la subida del nivel del mar
Otra razón por la cual Groenlandia es un destino clave en la investigación del clima se debe al hecho de que el hielo que se derrite desde Groenlandia contribuye más al aumento de los océanos que cualquier otra cosa en el mundo, según Box. De hecho, ha centrado sus campañas en este lugar es porque es el más idóneo para su investigación sobre el equilibrio entre dos consecuencias contradictorias del cambio climático: por un lado, el hielo se derrite como nunca antes lo ha hecho y la humedad aumenta, lo que significa que hay más lluvia y también más nieve. Sin embargo, por otro lado hay menos hielo. Es ese complejo equilibrio el que está tratando de explicar.
«La nevada es crucial para la creación de nuevos glaciares, pero el hielo se está derritiendo actualmente, por lo que actualmente existe un equilibrio oblicuo», argumenta el investigador en este reportaje.